Noveno aniversario del paranirvana de Shamar Rimpoché

17 Nov 2023

Vous êtes ici : Accueil / Actualités / Karmapa.org / Noveno aniversario del paranirvana de Shamar Rimpoché

El 10 de junio de 2023

Thaye Dorje, Su Santidad el XVII  Gyalwa Karmapa,  comparte el siguiente mensaje en relación al paranirvana de su maestro, Su Santidad el XIV Kunzig Shamar Rimpoché.

Queridos amigos del Dharma,

El día de mañana marcará el 9º aniversario del paranirvana de nuestro eminente maestro, Su Santidad el XIV Kunzig Shamar Rimpoché, según el calendario occidental. Como cada año, muchos de nosotros marcaremos este día con ofrendas de oraciones, encendiendo lámparas de mantequilla, recitando mantras y realizando la práctica de Guru yoga.

He estado pensado en por qué conmemoramos el paranirvana de un gran bodhisattva como Shamar Rimpoché y me gustaría compartir algunos de mis pensamientos con todos vosotros.

Los budas o bodhisattvas no tienen por sí mismos motivo para ser recordados. Es solo por el bien de aquellos de nosotros que deseamos despertar que los recordamos, que recordamos su estado despierto, por así decirlo.

Estamos constantemente consumidos por nuestros sueños, nuestros sueños del mañana.

Sin embargo, es importante saber que los budas y los bodhisattvas no han decretado que no va a haber un mañana, ni que lo haya. Nosotros, en tanto que fervientes practicantes, a menudo nos sentimos desconcertamos, creyendo que lo que han querido decir es que no tenemos derecho a soñar, que ese es el propósito de la práctica.

Sin embargo, cómo han alcanzado el despertar fue o es, en cierta manera, mucho más simple y sutil de lo que pensamos. Tenemos derecho a soñar, pero debemos entender que, sin despertar, no hay sueño. Los sueños y el despertar, van de la mano.

Si nos permitimos el despertar sin forzarlo, entonces soñar es armonioso. Atención, “sin forzarlo” no significa que no practiquemos. Casi podríamos decir, “debemos practicar para ver si necesitamos practicar”, lo que significa que, al practicar de manera ferviente, nos damos cuenta de que la práctica es un método que nos permite realizar que el despertar no requiere ningún esfuerzo.

No es posible enseñar a un soñador a no soñar; sin embargo, es posible proporcionarle un método para que se dé cuenta de que los sueños terminan con el despertar. Por lo tanto, ofrécele el privilegio de decir: “¡Guau! ¡Vaya sueño!”

Se trata por tanto de conmemorar la aceptación de uno mismo (del propio karma) y la aceptación del otro (las bendiciones de Buda) y comprender que estos dos factores interdependientes están en el origen del sueño y del despertar.

Podemos soñar en tanto que seres atormentados, frustrados, ignorantes, sobrios, enojados o extasiados; todos estos estados de sueño no se deben al tiempo ni a otras fuerzas. Todos ellos se han permitido nada menos que por nosotros mismos. Aquellos a los que llamamos budas han aceptado completamente que permitimos estos diferentes estados, como lo habrían hecho madres amorosas. Su completa aceptación se indica en las representaciones de la Rueda de la Vida, en la que se muestra que un Buda está presente en los seis reinos como un símbolo así de su bendición continua e ininterrumpida.

Los budas no son ni jueces ni verdugos, ya ves. Dejan que los seres sensibles sean ellos mismos, sabiendo que eventualmente acabaran por aburrirse de tener todos esos sueños fantásticos.

Entonces, si “debemos” enfocarnos, entonces es cuestión de enfocarnos en la naturaleza de nuestros sueños. ¿Podemos hablar de sueños sin despertar? ¿Por qué tenemos miedo del despertar? ¿Puede que el despertar de alguna manera hará que nuestra identidad desaparezca?

Seguramente las bendiciones de los budas están presentes; si no fuera así, no estaríamos soñando, por así decirlo. Por lo tanto, no hay problema en soñar, como tampoco lo hay en despertar. Es nuestro privilegio tanto soñar como despertar.

Queridos amigos del Dharma, podáis, guardando esto esto en mente, practicar.

Con mis oraciones,

Su Santidad el XVIIᵉ Gyalwa Karmapa,
Trinley Thaye Dorje

Noveno aniversario del paranirvana de Shamar Rimpoché

Lire aussi…